Pues sí, señoras y señores, no nos podíamos saltar este concepto: mockup. ¿Te suena de algo?
Es una palabra muy habitual dentro de la jerga de los diseñadores de páginas web, porque en ocasiones, se suele hacer un boceto o mockup antes de diseñar la propia web o incluso los logos de una corporación.
Mockup: qué es
En el sector de la informática hay muchos conceptos que son completamente desconocidos para el usuario de a pie. Ya sabes que en Ensalza, nos gusta hablar tu idioma y aparte de ofrecer servicios de desarrollo y programación web, queremos que entiendas cómo trabajamos y que al menos, te suenen todos estos conceptos por si algún día tienes que utilizarlos.
¡Al lío!
Un mockup se define como una especie de maqueta a escala o de tamaño completo de un diseño. Digamos que, es un montaje digital que muestra un diseño o una aplicación web de manera realista, para que cualquiera pueda hacerse una idea del trabajo que se va a llevar a cabo o que se ha realizado. Si buscas ejemplos de mockups, puedes ver varios dentro de nuestro portfolio de proyectos.
Los mockups suelen ser bastante útiles en aquellos casos en los que cliente cuenta con conocimientos previos y quiere mostrarle al diseñador gráfico un mockup de cosecha propia para que sepa lo que tiene que programar o diseñar, o al menos, para explicar de manera visual e inequívoca, lo que tiene en mente, o si por ejemplo, se trabaja con diversas agencias en la que cada una, lleva a cabo una parte del proyecto: branding, diseño gráfico, diseño y desarrollo web…
No todos los profesionales nos elaboran. Sin embargo, este tipo de Mockups o fotomontajes son cómodos para que el cliente final se pueda hacer una idea de lo que va a tener. Además, se puede aplicar en multitud de materias diferentes, no solo en páginas web. Por ejemplo, apps móviles, logos, tarjetas de visita, folletos, etc.
¿Cómo se hace un mockup?
Esta maqueta en forma de primera aproximación del diseño final se puede realizar de diferentes maneras, aunque lo más habitual es utilizar programas de edición de imágenes como Photoshop, aunque cada vez hay más aplicaciones online que permiten realizar mockups de una forma rápida y sin necesidad de grandes conocimientos de edición gráfica, por lo que el principal formato para trabajar con mockups es el popular .psd.
No obstante, los diseñadores más experimentados, prefieren, en ocasiones, realizar la vista previa del diseño directamente en un prototipo de la futura página web, pudiendo de esta forma, realizar comprobaciones reales del comportamiento responsive del diseño en diferentes dispositivos.
¿Qué se muestra en un mockup?
En este modelo se muestra una primera aproximación de cómo se verá el producto y sus funcionalidades. Por ejemplo, pueden mostrar no solo cómo será cada página o ventana, sino también otros detalles visuales importantes como los colores que se van a emplear, la tipografía, las imágenes, vistas previas en diversos dispositivos…
¡No lo vayas a confundir con un wireframe, que es mucho más esquemático!
Cuanto más se defina, mejor, dado que será más realista y el cliente final podrá valorarlo de forma más objetiva, sin tener que imaginar tanto cómo será el resultado. Por eso es importante trabajar en algo básico y ampliarlo conforme se avanza en el proyecto.
¿Es imprescindible hacer un mockup?
Desde luego, es recomendable, aunque no es obligatorio, ni mucho menos necesario.
Lo imprescindible siempre a la hora de crear una nueva web es tener en cuenta el tipo de proyecto, la organización de los contenidos y la estructura de cada página para poder pasar directamente al diseño final: si se tiene claro todo esto desde el principio, se podrá diseñar todo más rápidamente y satisfacer al cliente final, lo que hará que todo el proceso sea más sencillo y cómodo para ambos.
Y tú…¿cómo trabajas?
